Claro está que Jannik Sinner (1º del ranking ATP) es el principal candidato a ganar en cualquier torneo al que se presente, pero eso no quita que hasta para el propio italiano las cosas se tornen cuesta arriba. Y así fue como en su victoria ante Adrian Mannarino (89º) por 6-4 y 7-6 (4) debió luchar mucho más de la cuenta para asegurar el pase a los cuartos de final del Masters 1000 de Cincinnati.
En conferencia de prensa tras la victoria, el número 1 del mundo habló acerca de las cualidades de su rival, que lo puso en jaque a lo largo del partido: “Son muchas cosas las que hacen que un rival sea muy difícil. En el caso de él (Mannarino), lo primero de todo es que es zurdo y mantiene la bola muy baja y después le da mucho efecto, tanto con la derecha como con el revés. Simplemente intentaba entender qué podría funcionar contra él en ciertos momentos. Retrasé mi posición en el resto para leer mejor su saque, también intenté romperle el ritmo. Pero la verdad es que sacó muy bien durante todo el partido"..
Además de destacar el saque del francés, quien propició 10 aces, se enfocó mucho en la gran dificultad que tiene jugar en Cincinnati, sobre todo por su clima. Un clima que no jugó a favor del torneo con una lluvia que interrumpió el partido durante casi tres horas: "En este tipo de encuentros tenés que intentar sentir la bola, pero fue muy difícil con el retraso por la lluvia. En esos momentos intentas relajar tu mente, jugás con tu equipo y después, cuando volvés a la cancha, intentas recuperar el nivel mostrado anteriormente. Pero no siempre es fácil, el tenis tiene muchas subidas y bajadas, así que estoy muy feliz de estar en cuartos".
"Creo que ya lo dije el año pasado, pero es muy difícil jugar bien al tenis en Cincinnati. A veces hay mucho viento, otras veces llueve y después sale el sol. Nunca sabes lo que puede pasar, pero tenes que estar centrado mentalmente”, comentó el oriundo de San Candido. Lo que sí es seguro es que esta vez el clima no acompañó en absoluto, presentando desde incesantes lluvias hasta olas de calor que complicaron la salud física de varios jugadores.
Pero ya con la mente y el físico más descansados, el reciente campeón de Wimbledon ya piensa en su próximo contrincante, el canadiense Félix Auger-Aliassime (28º), uno de los pocos tenistas activos del circuito que tiene un historial positivo (2-0): “Nunca he podido ganarle a Auger-Aliassime. Tuvimos un partido muy duro acá en 2022 (2-6, 7-6 (1) y 6-1). Tiene mucho potencial, sobre todo cuando tiene un buen servicio, va a ser muy difícil, pero, sinceramente, estoy deseando jugar contra él. Me gustan estos desafíos y espero alcanzar mi nivel porque si quiero jugar bien contra él tengo que mejorar mi tenis”.
Cabe recordar que Sinner, que alcanzó su décimo festejo al hilo, debe defender el campeonato conseguido en el 2024 si no quiere perder puntos y darle así la esperanza al español Carlos Alcaraz (2°) de un posible arrebatamiento de la cima del escalafón mundial en un futuro no tan lejano.
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